Erradicar la pobreza no es un acto de caridad, es un acto de justicia. Casi la mitad de la población mundial vive en la pobreza: la falta de alimentos y agua potable acaba con las vidas de miles de personas cada día del año. Juntos podemos alimentar a los que más lo necesitan, evitar las muertes por enfermedades y, en definitiva, dar a nuestras comunidades la oportunidad de prosperar y vivir una vida digna y segura.

El cambio climático está generando un alarmante impacto en nuestro planeta. Los últimos siete años (2015-2021) han sido los más cálidos de los que se tiene constancia; las concentraciones de gases de efecto invernadero alcanzaron un máximo mundial en 2020; y los mantos de hielo están disminuyendo considerablemente desde 2013, con las importantes repercusiones que esto conlleva (los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes, los hábitats naturales como los arrecifes de coral, están disminuyendo, etc). Ante esta fatídica realidad, está en nuestras manos hacer todo lo posible por contribuir a proteger nuestro hogar: la Tierra.

Apostar por la educación tecnológica es una inversión de futuro. Para hacer frente a los nuevos retos a los que se enfrenta nuestra sociedad, como pior ejemplo la transformación tecnológica de las economías o la transición energética haca un modelo de generación de bajas emisiones de carbono, necesitamos aprovechar todo el talento disponible en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM). Desgraciadamente, el interés por estas disciplinas está desapareciendo entre los más jóvenes. Por eso, desde el departamento de Compromiso Social de Siemens Gamesa nos alineamos con el ODS4 (Educación de Calidad) para promover la educación en STEM en todo el mundo.